Así vió el partido Omar Holotte

omar holotte

Entrá y mirá el comentario del 4-2 en Cerrito.

El partido, en apenas 7 minutos de juego tuvo el marcador abierto por parte de la visita en los pies del Nº6 Martínez, después de un borbollón en el área.

Unión Agrarios, con la misma  formación que enfrentó a Sarmiento, fue en busca del empate y lo consiguió a través de su goleador Iván Aguilar a los 14’ que, gracias a una pelota lanzada perfectamente por el defensor Borghello, la envió contra un palo, a contra pierna del arquero para el 1-1.

El paridad permaneció hasta el final de la primera etapa. Faltaba intensidad.

Llegó el segundo; a los 12’, el Nº2 Diego Simón clavó un tiro libre en el ángulo superior izquierdo, inatajable para Varisco. Otra vez Cerrito en desventaja, se fue al ataque a buscar nuevamente la igualdad; la consiguió a través de Nicolás Borghello en una polémica jugada que todos los jugadores y cuerpo técnico reclamaron ferozmente por una supuesta mano: el árbitro Ibarra lo convalidó, aunque el enojo continuaba y el fútbol no.

Luego, el rojo se quedó con 10 por la expulsión del mismísimo Simón, autor de la joyita, por una fuerte infracción sobre Joaquín Petersen; a todo esto se les sumó la lesión del Nº5 Pedro Suarez que los dejó con 10 porque ya habían hecho los tres cambios.

Por el lado del local, el DT Richard jugó una ficha importante; sacó a Santiago Borghello y mandó al campo a Mariano Schmidt, quien venía dulce por las 2 anotaciones en sub 20. No pasaron tantos minutos para que llegue una combinación barceloneana; Pecker habilitó a La Pulga Díaz y éste le colocó una bocha inefable para que Rapo embarace la red y lo de vuelta 3-2, en 47’.

¿Y se terminó? No. Como si fuera poco, Velásquez sacó la chapa de máximo anotador, corrió por derecha y, como un tal Chelo Delgado, sacó un remate de tres dedos que ingreso besando el caño izquierdo. Una tarde de locos. El semejante desahogo de los verdes no era para menos, ya que se celebraba la victoria y la punta del torneo.

El arbitraje de Gabriel Ibarra fue regular. Interrumpió mucho.

La cancha estaba en buen estado.

El público emocionó cantando sobre el cierre.